Sobresalto en la Renta para cientos de contribuyentes: Hacienda les atribuye ganancias por apuestas que no han realizado
La campaña de la Renta de este año ha comenzado con una desagradable sorpresa para muchos ciudadanos: la Agencia Tributaria está imputando por primera vez beneficios por juegos de azar a contribuyentes que nunca realizaron esas apuestas.
Detrás de estos casos se esconde un nuevo tipo de fraude: la suplantación de identidad fiscal por parte de jugadores semiprofesionales que utilizan los DNIs de terceros para abrir cuentas en casas de apuestas online. Estos delincuentes obtienen beneficios, pero a ojos de Hacienda, quien ha ganado ese dinero es la persona a cuyo nombre está registrada la cuenta, es decir, la víctima de la usurpación.
El resultado es alarmante: ciudadanos que nunca han apostado se encuentran con ganancias imputadas en su borrador de la Renta, lo que puede suponer una importante carga tributaria si no se actúa rápidamente.
¿Qué hacer si te imputan ganancias de apuestas que no son tuyas?
Los expertos fiscales son claros: lo primero es no aceptar el borrador tal como viene. El contribuyente debe modificar la declaración, eliminando esas ganancias que no le corresponden. A continuación, debe presentar una denuncia formal ante la Policía Nacional o la Guardia Civil por suplantación de identidad.
Con la denuncia en mano, es imprescindible remitir un escrito a la Agencia Tributaria explicando el caso, adjuntando copia de la denuncia y justificando que esas ganancias no le pertenecen.
Este procedimiento es la única vía para evitar que Hacienda exija el pago del IRPF por unos ingresos que nunca se percibieron.
¿Por qué ahora?
El auge de las plataformas de apuestas online y la sofisticación de ciertos perfiles de apostadores ha dado lugar a una nueva forma de ciberdelincuencia. En muchos casos, estos estafadores compran o acceden ilegalmente a datos personales —como copias de DNIs— para abrir múltiples cuentas y aprovechar bonos de bienvenida u otras ventajas, generando ingresos que atribuyen a terceras personas.
La Agencia Tributaria, por su parte, actúa conforme a la información que recibe de las plataformas de juego, que reportan las ganancias con el NIF del titular de la cuenta. De ahí el problema.
Este caso pone de relieve la importancia de proteger nuestros datos personales y de estar atentos ante cualquier irregularidad en nuestra declaración de la Renta. Y sobre todo, ante el menor indicio de suplantación, actuar rápido. Hacienda no perdona, pero la ley ampara a quien demuestra que no ha sido el responsable de los hechos.