La pandemia de la COVID-19 dejó un impacto económico devastador, especialmente entre los autónomos. Sin embargo, no todos los profesionales que solicitaron ayuda lograron recibirla. Según datos oficiales, el Gobierno ha denegado 45.357 prestaciones por cese de actividad, lo que representa el 3,05% de los reconocimientos provisionales realizados por las Mutuas Colaboradoras con la Seguridad Social.
Requisitos para acceder a las prestaciones por cese de actividad
Para acceder a estas ayudas, los autónomos debían cumplir tres requisitos esenciales:
- Estar dados de alta en la Seguridad Social o al corriente de pago de sus cuotas.
- Demostrar que su actividad estaba suspendida como consecuencia de la crisis sanitaria.
- Cumplir con los criterios establecidos durante la revisión y verificación de la documentación.
¿Por qué se han denegado 45.357 ayudas a autónomos?
El Ejecutivo ha justificado estas denegaciones tras verificar que no se cumplían los criterios necesarios en las solicitudes revisadas.
Las denegaciones han generado inquietud en el colectivo de autónomos, que ya enfrentaron enormes desafíos durante la crisis sanitaria. Muchos de ellos consideran que estos requisitos eran demasiado estrictos en un momento en el que la actividad económica estaba paralizada en gran parte del país.
Por otro lado, estas cifras reflejan la magnitud de las solicitudes y el arduo proceso de revisión llevado a cabo por las Mutuas Colaboradoras. Durante la pandemia, las mutuas gestionaron una gran cantidad de solicitudes de manera provisional, lo que permitió a miles de autónomos acceder a ayudas económicas esenciales en los momentos más críticos.
Impacto de las denegaciones en los autónomos tras la pandemia
Aquellos autónomos a los que se les ha denegado la prestación tienen derecho a recurrir si consideran que cumplen con los requisitos. Para ello, deben presentar documentación adicional o aclaratoria que respalde su caso ante la Administración.
Por último, estas cifras subrayan la importancia de un marco más flexible y transparente para la gestión de ayudas en situaciones excepcionales como la pandemia, ya que los autónomos son uno de los pilares fundamentales de la economía española.